Situada a la izquierda de la carretera que baja desde 'Las Ventas', la Balsa de los Balcones ha sido uno de los lugares de donde se abasteció de agua la población hasta la llegada del agua canalizada del río Guadalope en el año 1973.
Datada al menos desde el siglo XVI, fue en 1817 cuando se levantaron sus actuales muros de piedra. Posee acceso al interior mediante una escalera, y una capacidad cercana a los 800.000 litros.
En el año 2004 fue objeto de una limpieza y restauración, tanto la balsa como su entorno, incorporándose un barandado de forja que hace honor al nombre que recibe.